viernes, 16 de agosto de 2013

Reporte




















Javier Miranda con sus Coaches del CrossFit Olympic Weightlifting Course, Buenos Aires - Argentina.

Para comenzar un viaje a un lugar nunca antes visitado, a compartir con compañeros provenientes de  diferentes latitudes sudamericanas de lo que mas disfrutas y junto con deleitarse un fin de semana en un destino tan interesante y a la vez cautivante ,como lo es Buenos Aires, que mejor que llegar al modulo de registro de la aerolínea, consultar por tus pasajes y que te digan que el vuelo que debías tomar no salía a las 6:40 de la tarde, …sino que a las 6:40 de la mañana!! 
Así empezó el viaje, finalmente y con demasiada suerte, no se como logre subirme a otro avión que ya estaba casi por salir.

Apenas llegue al lugar en donde tenia arreglado mi alojamiento, (un hostel muy hippie pero agradable, donde me recibió un recepcionista/crossfiter que reconoció mis zapatillas y me ofreció casi de todo) decidí salir a comer y probar ese famoso “bife de chorizo” del que tanto hablan, bueno. no encontré precisamente eso, pero aun así probé la carne argentina que sin duda que tiene una calidad notable, llegue a una especie de club social, muy de barrio, el Club EROS, ahí note o se dejaba ver la personalidad de los argentinos, en una esquina muy alto un televisor pasando un partido de River Plate, con un grupo de fanáticos gritando y maldiciendo, al parecer a un jugador que acababa de convertir un gol, en contra de los locales. A mi derecha un par de hombres cercanos a los 50 años que conversaban de amor, y a mi derecha una pareja de jóvenes que me sorprendió por su admirable comunicación no verbal. Esa fue la primera impresión.

En ese lugar solo se escuchaban risas y alegría, todo parecía vivo. Los niños con sus padres, las abuelas, aparentemente ese lugar me enseñaba algo que probablemente nosotros olvidamos y es que existe solo el ahora.

Al día siguiente comenzó lo que era mi propósito. Dos días de instrucción en el seminario de Crossfit Olympic Weightlifting fueron un éxito, compartir la visión de CrossFit con extranjeros ayuda mucho a encaminar cuales deben ser nuestras prioridades en el entrenamiento y también saber cuales son nuestras potencialidades. 


También tuve la oportunidad de visitar dos boxes totalmente opuestos, no tanto en la forma de entrenar, sino que en como el espíritu de CrossFit se deja ver. Por un lado uno de ellos tenia una infraestructura muy completa, espacios muy cómodos, servicios y productos para lo clientes del box y hasta promociones tipo, “combo” tal como en los locales de comida, pero esa fue mi primera impresión, quienes estaban ahí eran eso: “clientes”,  Y claro, finalmente el entrenamiento correspondiente, como ultima cosa en la lista de ítems que se pueden ofrecer.  Por otra parte, CrossFit Unidos mostraba lo que quizás compartimos de cierta manera con nuestro box, la calidad del entrenamiento y la comunidad. Me parece perfectamente compatible el hecho de tener instalaciones cómodas, para los alumnos que nos visitan, pero nunca deberíamos perder el norte en cuanto a cual es nuestro espíritu como comunidad, y ahí creo que tenemos un capital invalorable del que podemos enorgullecernos y es que nuestro espíritu siempre será el de fortalecernos no solo entrenando fuerte sino que también formando uniones entre quienes formamos este circulo que siempre esta abierto para alguien que quiera encontrar la mejor versión de sí mismo. No creo que queramos sumar mas “clientes” a nuestra comunidad,  sino que mas “alumnos”, los mismos que queremos ver crecer en capacidades y principalmente ayudarles a dar el primer paso en ese camino de búsqueda constante de la plenitud del ser humano.

- Javier MIranda